Su vuelta no convence, pero llega a Cruz Azul gracias al Tuca

El nombramiento de Ricardo Ferretti como el nuevo entrenador cementero avivó las esperanzas de la afición de recuperar un torneo que parecía perdido por la mala planeación y los pocos refuerzos de calidad que llegaron al equipo, pero ahora se notan más entusiasmados que nunca.

De los candidatos que se barajaban para llegar a la ‘Máquina', el ‘Tuca’ era uno de los preferidos para ser nombrado, aunque dado el historial de la directiva se pensaba que nombrarían a alguien de menor bagaje como Hugo Sánchez, quien estuvo realmente cerca de regresar a dirigir en primera división.

Dentro de lo que más hacía falta en el equipo para recuperar la confianza era ganar los partidos, cosa que sucedió gracias a Joaquín Moreno, bajo su interinato, el equipo consiguió apuntarse sus primeras dos victorias del torneo. Tan fructífero fue su interinato que se ganó un puesto en la nueva dirección técnica.

Durante el primer partido de la era ‘Tuca’ se notó el trabajo de Joaquín Moreno, con llegadas claras a portería y anotando, que es lo mejor que se consiguió rescatar en su gestión, sin embargo, durante el segundo tiempo llegó un invitado que hace mucho no llegaba a la ‘Máquina’ y parece fue para quedarse.

<strong>¿El regreso no deseado?</strong>

Durante la era de Juan Reynoso, la afición se quejaba demasiado de que los partidos se ganaban solo con marcadores de uno a cero, donde el equipo conseguía el gol y se tiraba atrás a defender el resultado. Ese estilo de juego denominado “unocerismo” no fue para nada del agrado de la fanaticada, aunque el ‘Tuca’ es bien conocido por tener muchos partidos con esa tónica de juego.