Nadie se salva, la carta que envió la directiva de Cruz Azul a sus jugadores

Las últimas décadas no han sido del todo buenas para Cruz Azul en términos generales, pero uno de los momentos en los que el equipo tocó fondo fue durante el torneo Clausura 2003, cuando obtuvo su primera victoria hasta la jornada 10 por 2-0 sobre Pumas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), tras haber registrado seis empates y tres derrotas.

Los malos resultados obligaron a la directiva encabezada por Guillermo Álvarez a tomar medidas drásticas y despedir a cada uno de los futbolistas que formaban parte de la plantilla, incluyendo estrellas de la talla de Óscar Pérez, Juan Francisco Palencia y Sebastián Abreu, entre otros que también estaban compitiendo en la edición 2003 de la Copa Libertadores.

ESPN sacó a la luz la carta que, supuestamente recibió Melvin Brown hace 20 años: “… Le informamos que la Directiva del Club decidió dar por rescindido a partir de esta fecha, el contrato de trabajo que tenemos celebrado entre las partes, para la temporada oficial de Clausura 2003 y Apertura 2003 del campeonato de futbol organizado por la Federación Mexicana de Futbol Asociación, A.C.”

Brown explicó su teoría acerca de la legitimidad del documento: “Eso no era posible, porque sí te pueden correr, pero a la par nos ofrecieron otro nuevo contrato y eso no existe ni en México ni en ninguna parte del mundo. Asumo que esta carta que estoy mostrando era falsa, porque no te puedes contratar en un mismo torneo con un equipo dos veces."

A final de cuentas, Cruz Azul logró clasificar al repechaje.

Cruz Azul cerró aquella temporada en la décimo primera posición y fue eliminado por Chivas con un marcador global de 5-5, debido a que su rival cerró en octavo y el criterio de desempate era justamente el puesto de cada uno en la clasificación general después de la fase regular.